“Resiliencia” es la
cualidad o propiedad de recuperar rápidamente la forma después de haber sido
empujados, presionados, chocados, etc.…
Cuando se aplica este término a la
conducta humana, vemos que la Resiliencia se refiere a: Obtener logros provechosos
a pesar de estar en situaciones del alto riesgo, como la exposición continuada
a situaciones de represión, tensión, estrés, pobreza extrema, o por el
contrario, lucha por el éxito, competitividad, afán de logro.
Mantener la
capacidad de lidiar con situaciones difíciles aún bajo amenazas o riesgos como
en ocasiones de desastres naturales, guerras, muerte en la familia, presión por
el logro de metas exigentes. Lograr recuperación de traumas, como el abuso
infantil, abandono, enfermedad severa, accidentes. Otros conceptos relacionados
con la Resiliencia son: resistencia al estrés, fuerza de voluntad, tensiones
diarias, autoconfianza.
REACCIONES
ANTES DE LAS CRISIS Y EL DESRROLLO DE LA RESILIENCIA
Cuando una persona
experimenta una situación crítica o difícil, él o ella pueden reaccionar de las
siguientes maneras: Asumir la crisis como un peligro adaptándose a esa manera
negativa.
Por ejemplo:
• Un niño o niña
que tiene un padre alcohólico, puede desarrollar conductas violentas hacia los
adultos o hacia otros niños o niñas.
• Un joven puede
escoger la bebida o la droga frente a la falta en los estudios o a dificultades
con su familia.
• Un adulto puede
desarrollar un trato seco y cortante en sus relaciones personales, como
reacción ante dificultades económicas.
Por otro lado,
ante estas mismas circunstancias, las personas con capacidad de Resiliencia ven
en las crisis una oportunidad para usar su creatividad y su habilidad
de resolver problemas.
Por ejemplo:
• El niño o niña
resiliente, aún conviviendo con un padre alcohólico, puede desarrollar
armoniosamente su capacidad de convivencia con otros adultos.
• El joven o la
joven que posee la capacidad de superar retos, considera la dificultad en los
estudios como un incentivo para esforzarse más y salir adelante.
• El adulto con
problemas económicos pero con habilidad de resolver problemas, usa su
creatividad y encuentra formas de salir a flote, sin perder la dulzura del
carácter.
LAS CONDICIONES PARA QUE SE
DESARROLLE LA RESILIENCIA
Las
investigaciones que se han realizado en diversas regiones del mundo sobre cómo
responden las personas ante los riesgos y la adversidad, demuestran que esta
respuesta depende de la existencia o no de condiciones favorables, tanto
personales como ambientales, que permiten el desarrollo de los procesos de
autoprotección, resistencia y superación de situaciones apremiantes y adversas.
A estas
condiciones favorables se les llama Factores Protectores. Los factores
protectores son condiciones ambientales y/o personales que permiten el manejo
apropiado de los riesgos y las dificultades, favoreciendo la resolución
creativa de los problemas. Se requieren características personales y
ambientales para facilitar los factores protectores de la Resiliencia.
CARACTERISTICAS
PERSONALES
• Capacidad de
control de los impulsos.
• Sentido de la
generosidad y de servicio.
• Sentido del
humor.
• Competencia en
alguna destreza o habilidad; por ejemplo: ser bueno en manualidades o
en lectura.
• Un ambiente
afectivo libre de amenazas.
• Presencia de
oportunidades de crecimiento personal.
• Acceso a
servicios de atención para satisfacer las necesidades básicas.
Podemos identificar 3 fuerzas
que promueven los factores protectores de la Resiliencia. Estas 3 fuerzas actúan
armoniosamente para “construir” una personalidad segura y firme que sabrá
responder apropiadamente ante las crisis y responder a estas como ante una
oportunidad:
• Tener personas
que se interesan por él o ella.
• Ser valorado (a)
y respetado (a) por las obras personas.
• Poder tomar
decisiones apropiadas.
En pocas palabras…
la formación de un ser humano requiere de condiciones que favorezcan la
capacidad para reaccionar positivamente, ante las crisis y circunstancias
tensionantes o adversas.
La Resiliencia o
capacidad de superar retos y resistir a la adversidad es una capacidad que
puede desarrollar y fomentarse, tanto en el hogar como en la escuela y la
comunidad.
Para favorecer el
desarrollo de la resiliencia se requiere la promoción de factores protectores
que se relacionan con características individuales y personales, de formación
del carácter y crecimiento personal.
Los factores se
identifican con 3 fuerzas facilitadoras de la Resiliencia:
• Tener personas
que se interesen por él o ella.
• Ser valorando y
respetado por las otras personas.
• Poder tomar
decisiones apropiadas.
Estas 3 fuerzas
pueden desarrollarse a través de la educación, tanto en la escuela como en
el hogar. Los padres, madres y familiares adultos, la escuela,
los maestros y maestras juegan un papel importante en el desarrollo
de la Resiliencia de niños, niñas y jóvenes.